Y es que al Plan Madrid Nuevo Norte le han salido a última hora nuevos requerimientos legales de obligado cumplimiento. El pasado lunes 20 de mayo la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid remitía al Ayuntamiento la Declaración Ambiental Estratégica (DAE) y cuatro nuevos informes (Vías Pecuarias, Consorcio Regional de Transportes, Dirección General de Carreteras e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid y Canal de Isabel II) que, tras ser analizados por los servicios técnicos municipales del Área de Desarrollo Urbano Sostenible, suponen la necesidad de acomodar el expediente administrativo a los contenidos de los nuevos informes.
Aunque las modificaciones no afectan sustancialmente al contenido del Plan Madrid Nuevo Norte, han de redactarse antes de proponer la elevación del expediente para su aprobación provisional por el Pleno del Ayuntamiento de Madrid, lo cual supone una nueva demora en los plazos previstos.
Manuela Carmena ha declarado que “se nos exige el cumplimiento de cuatro nuevas condiciones que no se pueden improvisar y que es necesario que se analicen y se acometan bien. Todas son aceptables y todas se van a poder cumplir, pero no lo podemos hacer en veinticuatro horas”. Lamenta que la declaración ambiental se haya remitido desde la Comunidad de Madrid en estas condiciones “con esta oscuridad y en este tiempo en que ya se sabía que no se iba a poder cumplir lo que exigía la propia Comunidad”. No obstante, se ha comprometido a que "en el primer pleno ordinario, una vez que se vuelva a la vida normalizada en el Ayuntamiento, se incluya en el orden del día la convocatoria para la aprobación del Plan Madrid Nuevo Norte”.
De esta forma una de las mayores operaciones urbanísticas del municipio de Madrid y que afecta directamente a la configuración futura del barrio de Las Tablas tendrá que esperar a la vuelta de elecciones para encarar su fase definitiva de tramitación.
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